Un gran número de nuestros alumnos son estudiantes, ya sea por que quieran complementar su formación, su expectativas de trabajo o para convalidar la asignatura de Formación y Orientación Laboral FOL en Formación Profesional, por eso vamos a realizar un hincapié en el uso de las mochilas y consejos para cuidar la espalda.
En la selección de la mochila debe de tener en cuenta los siguientes puntos:
- - Que sea ligera y tamaño adecuado.
- - Tirantes ajustables en altura, para poder llevarla cinco centímetros por debajo de la cintura.
- - Respaldo acolchado, cómoda, sin partes duras, plásticos, metales u otros que hagan contacto con el cuerpo.
- - Tirantes anchos, de almenos 4 centímetros en la zona de los hombros.
- - Tirantes separados en la zona superior para evitar rozaduras en el cuello.
- - Tirantes acolchados.
- - A poder ser que tenga cinturón en la parte delantera, así al abrocharlo equilibrar el peso entre los hombros y la zona lumbar de la espalda.
En el uso de la mochila debemos:
- - Llevar el material necesario, para no sobrecargar la mochila. Además de distribuir los libros o materiales más pesados al fondo mde la mochila (junto la espalda).
- - El peso que se lleve en la mochila no debe de superar el 10% de la persona.
- - Llevar siempre con los dos hombros. Colocarse la mochila sobre un solo hombro es incorrecto.
- - Llevar la mochila lo más pegada al cuerpo posible.
Nunca debemos olvidar que cuando cargamos con un peso, por ejemplo, la mochila a la espalda hay que flexionar las rodillas siempre que nos agachemos.
Un mal uso de la mochila, mala colocación, mala distribución del peso de los materiales o el peso excesivo puede provocar lesiones, entre otras, dolores de cuello, espalda u hombros. Por eso es importante no llevar demasiado peso a en la mochila por que provoca que el cuerpo y la cabeza se flexionen hacia delante. Al inclinarse el cuerpo hacia delante puede provocar los dolores de caderas, rodillas, espalda, hombros y cuello.
Entre las lesiones además de los posibles dolores detallados, pueden aparecer problemas de nervios, circulación, adormecimiento y debilidad en las extremidades.
También están disponibles las mochilas con ruedas, una alternativa en auge en los últimos años. Las cuales también hay que tener cuidado en su uso, este tipo de mochilas es recomendable utilizarlas empujándolas hacia delante en vez de arrastrarla, ya que un contínuo arrastre del peso puede provocar también lesiones en manos y brazos como tendinitis. Uno de los inconvenientes en el uso de este tipo de mochilas es que los suelos suelen ser irregulares, haber escaleras, bordillos, etc.
Siempre se ha sabido que con la gran carga de libros y materiales que se utilizan en colegios, institutos, centros de formación profesional y universidades, el seguimiento de estas pautas son difíciles, pero si se hace lo posible, la salud, principalmente la relacionada con la espalda nos lo agradecerá.